Igualdad de condiciones.

Hoy ha sido un día extraño, sin duda.
El día ha empezado como otro cualquiera, con la pereza de levantarse y las ganas de avanzar el reloj a la hora del recreo.
Lo diferente ha venido en la hora de tecnología. Mi profesora de este año es sin duda, una mujer luchadora que no tolera las injusticias.
Yo creo que es la mejor que he tenido en años, explica genial, sabe como captar la atención de tal manera que incluso los rebeldes logran una buena nota y no suele poner castigos simplemente porque no los necesita. De vez en cuando eleva el tono de voz para que no desconectes (lo cual a mi me va muy bien, ya que me cuesta concentrarme). Sabe también aplacar los comentarios fuera de tema con sarcasmo y hacer que callen y se arrepientan. Incluso detecta cuando alguien está cansado o en las nubes y le da un pequeño toque de atención con humor, sin castigar, solamente hace un chiste o dice que vayas a mojarte la cara, para despertarte, y luego vuelvas.
Tiene autoridad y sabe lo que debe hacer, no le gusta que empollemos, sino que lo entendamos. Además, siempre encuentra un modo divertido para hacer las clases: Nos hace ocupar el lugar de electrones, hace comentarios graciosos...
En fin, volvamos al tema inicial.
Durante el principio de la clase, cuando la profesora colocaba en su mesa una carpeta y encendía el ordenador, salió el comentario de que el tutor había dicho en recientes entrevistas con padres que "Las chicas tienen más dificultades para las ciencias"  La profesora de tecnología, dejó todo lo que estaba haciendo para escuchar a mi compañera.
Entonces se la vio con ganas de soltar uno de sus discursos motivadores.
"¡SACAD TODOS LA AGENDA!"- dijo prácticamente chillando -"Quiero que apuntéis algo"
Nuestras miradas, las de los alumnos eran confusas. No sabíamos si quería ponernos examen, deberes, estábamos totalmente desorientados.
"Apuntad esto"
Escribió con fuerza en la pizarra y se apartó para que pudiéramos ver lo que debíamos copiar.
ESFUERZO=ÉXITO
Entonces retomó la palabra con decisión.
- "Yo soy ingeniera, soy mujer, tengo tres hijos y a pesar de eso he logrado lo que algunos hombres ni siquiera consiguen. Algunos de mis compañeros de instituto no tuvieron mi éxito. Y eran hombres. Y yo estoy como profesora porque mi esfuerzo me ha dejado elegir. Estamos en igualdad de condiciones. Vosotras, las chicas recordad que podéis conseguir lo que queráis con esfuerzo, aunque os digan que no."
Sin duda, las chicas de la clase estábamos totalmente de su bando, y los chicos tampoco se veían capaces de contradecirla.
" Recuerdo una vez que debía entregar un trabajo. Yo le dije a mi compañero la respuesta, y el dijo -No te creo, porque eres chica- Entonces yo, indignada, fui a hablar con el jefe, el cual nos dijo que efectivamente era él el que estaba equivocado. -La respuesta es correcta, incluso lo ha calculado mejor de lo que lo habría hecho yo- dijo"
Estábamos impresionados ante su discurso.
La profesora parecía emocionarse, transmitía sentimientos con sus gestos, alzaba la mano y subía la voz. Quería hacer oír.
"Y que sepáis que las chicas tenemos un carácter que nos lleva a la superación personal. Porque durante muchos años, no se nos trató justamente. Podemos hacerlo igual o mejor que un hombre."
Después de esto, nos habló de Marie Curie, que era una mujer que pese a estar en una época dura para nosotras, logró salvar a muchas personas inventando la penicilina.
"Siento haber hablado tanto, se han terminado las elecciones y parece que este dando un discurso electoral" rió.

Sé que este día quizás se me olvida en el futuro, por eso lo escribo aquí con la esperanza de recordar siempre que LAS MUJERES VALEMOS LO MISMO QUE LOS HOMBRES y que nadie puede decirnos lo contrario.
Debemos saber que tanto hombres como mujeres conseguiremos lo que queramos con esfuerzo, esa es la clave del éxito, no la raza ni el sexo.
No deben menospreciar-nos, ni nosotras menospreciarlos a ellos.
IGUALDAD.